
412
Ciencia y protección ambiental para el desarrollo agrario
por ser más competitivo, y sería mucho más provechoso para productores y comerciantes dado el mejor precio de
cotización. El objetivo era viable y para lograrlo era necesario incorporar al campesino cultivador al disfrute de
parte de los beneficios, por medio de un precio justo, de modo que se interese en el mayor cuidado del proceso de
preparación, cultivo, cosecha y secado. Además, se debía contar con el imprescindible concurso del Estado en la
facilitación de los transportes con caminos seccionales o vecinales que para entonces eran escasos e intransitables.
Observatorio Central de Ecología Agrícola
El traslado de la Estación a Moca hace pensar al doctor Ciferri en la posibilidad de transformar la observación
meteorológica en el campo agrícola con el propósito de «integrar y preparar elementos a la Ecología agraria».
En su
Informe
del año 1926 insiste cordialmente ante el Secretario de Estado de Agricultura en la necesidad de
ampliar los equipos con que contaba el observatorio meteorológico para elevarlo a Observatorio Central de
Ecología Agrícola que trabajaría en coordinación con el Observatorio Meteorológico Nacional de Santo Do-
mingo y las subestaciones existentes en diversos puntos del País. De esta forma, expresa «
junto a la meteorología
general, la meteorología agrícola está llamada a ser una potente ayuda a la agricultura
». Dicha «
meteorología agrícola sirve de
base a la Ecología aplicada a la agricultura, con la determinación de los periodos críticos de las plantas, los promedios fenoscópicos,
los porcientos de probabilidad de los varios fenómenos meteorológicos por cada docena y la merma de los productos derivante de
fenómenos meteorológicos desfavorables
».
32
Además de las proporcionadas por el servicio del Observatorio Meteorológico Nacional, ubicado en Santo
Domingo, que tenía una red de estaciones y subestaciones en diversas provincias, las informaciones meteoro-
lógicas de la Estación Nacional Agronómica de Moca eran complementadas con las suministradas por las
diferentes estaciones del Ferrocarril Central Dominicano, lo que permitía dar un seguimiento comparativo de
la pluviometría y la temperatura a distintos puntos del Cibao central y oriental, tal como aparecen en los repor-
tes anuales de la Estación Nacional Agronómica. No obstante, el nuevo desarrollo propuesto en la dirección
de una «meteorología agrícola» haría más específicas las observaciones, con importantes implicaciones para el
desarrollo forestal y agrícola. Para ello el director Ciferri solicitó seis «aparatos registradores automáticos nece-
sarios», a saber: 1) Termógrafo de aire y suelo; 2) Evaporígrafo; 3) Registrador de la duración de la irradiación
solar; 4) Pluviógrafo; 5) Anemógrafo; 6) Barómetro de mercurio para control. Con el establecimiento de di-
cho observatorio, se iniciarían los trabajos de medición de los datos determinantes para «las principales plantas
arbóreas y herbáceas cultivadas en el Cibao».
Formación de profesionales agrícolas
La formación de estos profesionales era la principal función del Colegio de Agricultura, cuya dirección ejercía
también el doctor Rafael Ciferri conjuntamente con la Estación Nacional Agronómica. Como se ha visto, el
cuerpo de técnicos de dicha Estación conformaba también el cuerpo de profesores del Colegio; Ciferri, como
director del Colegio, se ocupó de su formación continua. El ambiente de investigación y de inmersión en los
problemas y soluciones propuestas y experimentadas relativas a los cultivos nacionales era el contexto más
propicio para el aprendizaje de los técnicos en formación. Además, se creó una biblioteca y centro de docu-
mentación con decenas de títulos de las principales revistas especializadas en las diferentes ramas de las ciencias
agrícolas, especialmente de agricultura tropical, que se recibían en calidad de canje o por suscripciones paga-
das, en las cuales se difundía el conocimiento más avanzado y actualizado.
33
Sin dudas, en el Colegio estaban
dadas las condiciones para que sus egresados fueran reconocidos técnicos de alta calidad, a la que se añadía
también su formación ética personal y de respeto hacia la naturaleza.
Entre otras instalaciones, en el Colegio había un Campo de Experimentación Agronómica, además de un
Jardín de Aclimatación de plantas exóticas, con vistas a introducir al País aquellas nuevas especies de plantas