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Huellas italianas en la Catedral Primada de América
Huellas italianas en la Catedral
Primada de América
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Rector del Centro de Altos Estudios Humanísticos y del Idioma Español, director de la Oficina de la Obra y
Museos de la Catedral de Santo Domingo; investigador en la
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on muchos los italianos que han dejado su impronta en la Catedral de Santo Do-
mingo, Primada de América. Unos relacionados a la historia de la Catedral, a su
creación y evolución, mientras otros a su construcción, aportaciones artísticas y a su
conservación y restauración. El primero de ellos lo fue el Papa Giulio II (Julio II), quien
mediante la bula
Romanus Pontifex
del 8 de agosto de 1511 la crea, dedicándola a Nuestra
Señora de la Encarnación.
Giulio II nació en Albissola cerca de Savona el 5 de diciembre de 1443 bajo el nombre de
Giuliano della Rovere y murió en Roma el 21 de febrero de 1513 a los 69 años. Inició su
pontificado el 26 de noviembre de 1503. Se destacó como valiente guerrero ganándose el
epíteto de Pontífice terrible y la fama que acompaña a su nombre se debe especialmente al
restablecimiento de los Estados Pontificios y la liberación de Italia de su sujeción a Francia.
Aun así, no olvidó sus deberes como cabeza espiritual de la Iglesia.
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Fue un gran amante
de las artes, encargándole importantes obras pictóricas y escultóricas a Rafael, Bramante y Miguel Ángel, entre
otros, destacándose los frescos de Miguel Ángel de la Capilla Sixtina, así como el colosal Moisés que embellece
su mausoleo en la Iglesia de San Pietro in Vincoli.
Luego de la muerte de fray García de Padilla, quien fuera el primer Obispo designado para la recién creada
diócesis de Santo Domingo, pero que no llegó a gobernar su sede, pues muere en España antes de emprender
viaje a Santo Domingo, el Papa León X designa, mediante bula del 23 de noviembre de 1516, al italiano
Alessandro Geraldini como segundo Obispo de Santo Domingo, quien asumió el gobierno de la Iglesia Do-
minicana el 6 de octubre de 1519 convirtiéndose así en el primer Obispo residente de Santo Domingo.
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Alessandro Girolamo Geraldini nació en Amelia, región de Umbria, Italia, hacia 1455. Fue diplomático y
un gran humanista. Según narra José Luis Sáez en su
Episcopologio de la Arquidiócesis de Santo Domingo
, después
de dedicarse a la milicia en España, Geraldini fue copero real en 1469 y, después de su ordenación sacerdotal,
capellán mayor de la reina Isabel de Castilla y uno de los cuatro preceptores o tutores de las infantas María y
Catalina.
El 21 de marzo de 1521 Geraldini inicia la construcción de su Catedral, la cual no vio concluida debido a su
muerte ocurrida tres años después, el 8 de marzo de 1524. Fue enterrado en la Capilla Mayor, siendo sus restos
trasladados posteriormente a un mausoleo en la capilla construida en su honor por el canónigo Diego del Río.
Sáez también comenta que el mayor interés de Geraldini como Obispo fue la edificación de una verdadera
Catedral.
La magnificencia de la Catedral que comenzó a construir Geraldini se refleja en el siguiente poema, que escri-
bió mientras se ocupaba en construir el templo principal en la ciudad de Santo Domingo:
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Yo quisiera, Reina mia, / y Reina de todo el cielo, / para tu gloria y honor / levantarte digno templo.
Todas mis fuerzas consagro, / todos mis votos y anhelos, / hasta ver firmes las piedras / coronando mis deseos.
Escudo del Obispo
Alessandro Geraldini
en el portal sur de la
Catedral.
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Fachada de la Catedral
con el campanario.